Los demócratas boricuas en el Congreso apoyan el proceso de destitución en contra de Trump

Washington – Los cuatro demócratas boricuas del Congreso están solidarios y han promovido que la Cámara baja federal encamine un proceso de destitución en contra del presidente Donald Trump.
La congresista Alexandria Ocasio Cortez (Nueva York) ha sido de las más vocales en la Cámara baja federal a favor de un proceso dirigido a residenciar a Trump, pero ha advertido que destituir a Trump “no removerá la infraestructura de todo un partido que lo ha abrazado; el dinero oscuro que lo ha financiado; la radicalización que motiva a sus tropas; ni el racismo que él ha amplificado y reavivado”.
El martes, la speaker Nancy Pelosi anunció que el caucus de la mayoría demócrata decidió iniciar la investigación formal para determinar si se pone en marcha un proceso de destitución en contra de Trump, por haber reclamado en varias ocasiones al presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, que investigue el rol que tuvo el hijo del ex vicepresidente Joseph Biden, Hunter Biden, en la empresa de gas Burisma, que estuvo bajo investigación de un jefe de la fiscalía ucraniana cuyo despido promovió el gobierno de Barack Obama, debido a sus vínculos con actos de corrupción.
Biden es uno de los principales aspirantes a la candidatura demócrata presidencial y por ende un potencial contendiente de Trump para las elecciones generales de 2020. “Las acciones de la presidencia de Trump han revelado el hecho deshonroso de la traición del presidente de su juramento, la traición de nuestra seguridad nacional y la integridad de nuestras elecciones», dijo Pelosi, tras una reunión el martes a puertas cerradas del caucus demócrata.
La congresista Nydia Velázquez (Nueva York), por su parte, sostuvo que los hechos “sugieren que el presidente buscó reclutar a un líder extranjero para que le ayudara en su campaña de reelección” y exhortó a los republicanos a participar del proceso fuera de líneas partidistas.
“Pienso que la speaker Pelosi toma los pasos correctos hacia un proceso de destitución. Nadie en este país, ni siquiera el presidente, puede estar por encima de la ley. Esto es un asunto de democracia, del estado de derecho y la seguridad nacional”, indicó José Serrano (Nueva York).
Mientras, Darren Soto (Florida) sostuvo que Trump ha admitido haber pedido al presidente de Ucrania que le ayude con su reelección y “luego trató de encubrirlo”, al negarse a revelar la querella que presentó el funcionario federal que denunció las actuaciones del inquilino de la Casa Blanca.
La evaluación formal comenzará en el Comité de lo Jurídico de la Cámara baja, luego del análisis que presentarán varios presidentes de comités que han tenido bajo examen las actuaciones del presidente Trump.
De haber una recomendación a favor de la destitución del presidente de Estados Unidos, la Cámara baja – dominada por los demócratas 234 a 198-, tendría que aprobar cargos formales en contra de Trump y recomendar un juicio político en el Senado, donde los republicanos tienen una mayoría de 53 a 47. Para destituir a un presidente se requiere dos tercios de los votos del Senado.
Los demócratas han pedido la transcripción de la conversación entre Trump y Zelenski, previo a la cual el presidente de EE.UU. decidió frenar temporalmente una asistencia de $394 millones a Ucrania. También reclaman que se divulgue la querella presentada por el funcionario federal que reveló las polémicas peticiones de Trump al presidente de Ucrania.
Pelosi y el líder de la mayoría demócrata en la Cámara baja, Steny Hoyer, anunciaron – previo a la reunión del caucus- que mañana presentarán a votación una resolución demandando que el jefe del Directorio de Inteligencia Nacional (DIN), Joseph Maguire, divulgue toda la querella presentada por el funcionario que denunció la presión de Trump al presidente de Ucrania.
Trump dijo que entregará la transcripción de su conversación con el presidente Zelenski, la cual ha descrito como “preciosa” y ha calificado la investigación cameral en su contra como una “ridícula”. “Verán que fue una llamada muy amigable y totalmente apropiada. ¡Sin presión y, a diferencia de Joe Biden y su hijo, no hubo ‘quid pro quo’! ¡Esto no es más que una continuación de la cacería de brujas más grande y más destructiva de todos los tiempos!”, indicó Trump.
El líder de la minoría republicana, Kevin McCarthy (California), sostuvo que la speaker Pelosi no puede iniciar unilateralmente un proceso de destitución y dijo que es tiempo de que la mayoría demócrata reconozca que las elecciones de 2016 se acabaron.
Tanto el Departamento de Justicia de Estados Unidos como la mayoría cameral examinaron por dos años las denuncias de que el presidente Trump pudo conspirar con Rusia para dañar la campaña de Hillary Clinton a la presidencia de Estados Unidos. Aunque la investigación formal del fiscal especial Robert Mueller reveló los contactos de colaboradores de Trump con Rusia, no encontró evidencia para imputarle cargos.
Mientras, el fiscal Mueller no tomó posición formal en torno a una decena de incidentes en que el presidente estadounidense pudo interferir con la investigación sobre Rusia.
Pelosi y el líder de la mayoría demócrata en la Cámara baja, Steny Hoyer, anunciaron – previo a la reunión del caucus- que mañana presentarán a votación una resolución demandando que el jefe del Directorio de Inteligencia Nacional (DIN), Joseph Maguire, divulgue toda la querella presentada por el funcionario que denunció la presión de Trump al presidente de Ucrania.
Solo dos presidentes, Andrew Johnson (1865-1869) y Bill Clinton (1993-2000) se han enfrentado a un procedimiento de residenciamiento. Los dos sobrevivieron el juicio político en el Senado, donde se toma la decisión final. Un tercer presidente, Richard Nixon, dimitió antes de que la Cámara baja aprobara recomendar su destitución.